viernes, 3 de abril de 2009



Es lo que hacemos todos: nos lanzamos, y esperamos poder volar. Porque si no es así, caeremos como piedras. Y durante la caída nos preguntamos: ¿se puede saber por qué he saltado? Pero aquí estoy, cayendo. Y sólo hay una persona que en estos momentos puede hacerme creer que vuelo: y ese, .. eres .

No hay comentarios:

Publicar un comentario